La ósmosis inversa es una técnica avanzada de filtración de agua que utiliza una membrana especial para eliminar hasta el 99% de sales disueltas, metales pesados, cloro, contaminantes orgánicos, nitratos y otras sustancias del agua. Bajo alta presión, el agua atraviesa una membrana semipermeable: las moléculas de agua pasan, pero la mayoría de los contaminantes quedan retenidos.
¿Por qué usar ósmosis inversa en el cultivo de cannabis?
En el cultivo de cannabis—sobre todo en sistemas hidropónicos—la ósmosis inversa se valora por el control total sobre la calidad del agua. El agua filtrada por RO casi no contiene minerales (TDS entre 0–10 ppm), lo que permite al cultivador añadir los nutrientes precisos sin el riesgo de que contaminantes invisibles del agua del grifo alteren el equilibrio mineral o el pH del depósito.
El agua del grifo puede ser muy dura (alta concentración de minerales), llegando a varios cientos de ppm. Esta dureza compite con los fertilizantes, dificulta la absorción de nutrientes y puede causar oscilaciones de pH y toxicidad en las raíces. En hidroponía, donde la planta depende completamente de la solución nutritiva, esto supone un riesgo real de problemas graves en el crecimiento.
¿Cuándo se debe usar RO?
Siempre que el agua local tenga un TDS/EC alto, o contenga mucho calcio, magnesio u otros minerales.
En hidroponía—prácticamente es estándar, sobre todo en sistemas DWC, NFT o aeropónicos.
Cuando se cultiva con alta precisión (programas de alimentación tipo Athena, Advanced Nutrients).
Si el agua proviene de pozo, tuberías antiguas o zonas altamente contaminadas.
¿Cómo utilizar el agua de RO?
El agua de RO es pura pero prácticamente sin minerales. Antes de regar o llenar el depósito, hay que "acondicionarla" añadiendo calcio (Ca) y magnesio (Mg), ajustando el pH y mezclando el abono adecuado. El cultivador dosifica todo manualmente, obteniendo así el control absoluto de la composición. Esta precisión minimiza el riesgo de estrés, quemaduras nutricionales o carencias de micronutrientes.
Resumiendo
La ósmosis inversa en el cultivo de cannabis—especialmente en hidroponía—es una herramienta para quienes buscan eliminar riesgos y tener el máximo control sobre las condiciones de cultivo. Con RO, sabes exactamente qué reciben tus plantas, eliminando posibles interacciones indeseadas del agua del grifo. Es una inversión no solo en agua pura, sino en la salud, el crecimiento vigoroso y el máximo potencial genético de tus plantas.