La mayoría de los growers ha pasado por este momento. Todo parece “de manual”: el pH es correcto, el EC coincide con la tabla, los fertilizantes son de marca y el plan de abonado está bien ajustado. Y aun así, la planta no responde. Las hojas se vuelven pálidas o extrañamente oscuras, las puntas se queman, el crecimiento se frena y cada dosis adicional de fertilizante empeora la situación en lugar de mejorarla. Entonces aparece la palabra “bloqueo”. Pero un bloqueo no es una causa, sino un síntoma. Para entender por qué una planta no absorbe nutrientes, hay que mirar más allá: la transpiración, las raíces y la zona radicular como un solo sistema, no como tres problemas separados.
Los nutrientes no funcionan porque no pueden funcionar
Muchos growers olvidan algo básico: los nutrientes no se mueven solos. Los minerales llegan a las hojas únicamente junto con el agua. Y el agua se mueve dentro de la planta solo cuando hay transpiración, es decir, cuando las hojas liberan vapor de agua al aire. Si la transpiración se ralentiza o se detiene, incluso los nutrientes perfectamente equilibrados se quedan en el sustrato. La planta no está “rota”. Simplemente no tiene el mecanismo para absorberlos.
Por eso, muchos problemas que parecen carencias de nitrógeno, calcio o magnesio en realidad no lo son. Son problemas de transporte, no de disponibilidad.
La transpiración: el motor invisible de todo el cultivo
La transpiración conecta todo: aire, hojas, raíces y velocidad de crecimiento. Cuando las hojas liberan agua, se crea una succión que arrastra el agua y los nutrientes disueltos desde las raíces hacia arriba. Sin esta succión:
- las raíces no “aspiran” la solución nutritiva,
- el calcio y el magnesio no llegan a los brotes nuevos,
- los micronutrientes se acumulan en la zona radicular,
- el EC aumenta aunque la planta esté hambrienta.
Por eso pueden aparecer a la vez síntomas de carencia y de sobrefertilización. No es una contradicción, sino un flujo bloqueado.
Cuándo la planta deja de beber… y por qué
Una de las situaciones más engañosas es cuando la maceta permanece húmeda durante mucho tiempo. El grower piensa: “hay agua, todo está bien”. En realidad, es una señal de alarma. La planta deja de beber cuando no libera agua a través de las hojas. Las causas más comunes son:
- VPD demasiado bajo (demasiada humedad en relación con la temperatura),
- temperatura foliar demasiado baja,
- falta de movimiento de aire,
- zona radicular sin oxígeno.
En estas condiciones, añadir fertilizante es como echar carbón en un horno apagado.
Las raíces: la otra mitad del problema
Incluso con una transpiración correcta, la planta no absorberá nutrientes si las raíces no tienen oxígeno. Un sustrato constantemente húmedo es un error clásico. Las raíces del cannabis respiran. Sin oxígeno:
- los pelos radiculares mueren,
- la absorción de iones se detiene,
- la planta muestra síntomas de carencia,
- el grower aumenta el abonado y empeora la situación.
Por eso, mejorar el ritmo de riego suele ser más eficaz que cambiar de fertilizante.
Qué significa realmente un “bloqueo nutricional”
“Bloqueo” es una de las palabras más mal utilizadas en el cultivo. En la práctica significa que los nutrientes están presentes, pero la planta no puede utilizarlos. Las causas pueden ser:
- falta de transpiración,
- raíces frías,
- sustrato mal oxigenado,
- salinidad excesiva,
- microbiología alterada.
El denominador común es claro: el problema no está en la tabla de fertilización.
Por qué el pH y el EC suelen ser inocentes
Puede sonar provocador, pero en muchos casos el pH y el EC son correctos y el problema persiste. ¿Por qué? Porque describen la solución, no el proceso. Un pH perfecto no sirve de nada si el agua no se mueve. Por eso, ajustar el pH sin corregir el clima suele llevar a la frustración.
LED, cuartos de cultivo modernos y nuevos problemas
Las lámparas HPS ocultaban muchos errores gracias al calor. Los LED cambiaron las reglas del juego. Hojas más frías, menos calor radiante y mayor control climático hicieron que la transpiración se convirtiera en el cuello de botella. Bajo LED:
- las carencias “inexplicables” son más frecuentes,
- el Cal-Mag deja de funcionar,
- las plantas parecen hambrientas pese a una nutrición completa.
No es un defecto de los LED, sino una falta de comprensión del sistema.
Cómo diagnosticar el problema paso a paso
En lugar de cambiarlo todo a la vez, hazte estas preguntas:
- ¿La planta realmente bebe entre riegos?
- ¿Las hojas están activas o pesadas y apagadas?
- ¿Cuál es el VPD a la altura de las hojas?
- ¿El sustrato se seca y vuelve a oxigenarse?
- ¿La temperatura de las raíces es demasiado baja?
A menudo, una sola respuesta revela la causa real.
Qué corregir primero y qué no tocar
Regla de oro: primero el aire, luego el agua, y al final los nutrientes.
Si la planta no absorbe nutrientes:
- no aumentes el EC,
- no cambies de fertilizante de inmediato,
- no busques aditivos milagrosos.
En su lugar:
- corrige el VPD,
- mejora el movimiento de aire alrededor de las hojas,
- asegúrate de que las raíces respiren,
- simplifica el abonado.
Muchas veces, solo corregir el clima hace que la planta vuelva a responder.
Conclusión: los nutrientes son la última pieza del rompecabezas
Los fertilizantes son importantes, pero solo cuando el sistema funciona. Una planta no es una botella que se llena. Es un organismo vivo que necesita un impulso de transporte. Ese impulso es la transpiración, y su base es un buen clima y raíces sanas.
Si una planta no absorbe nutrientes, rara vez significa “necesita más fertilizante”.
Casi siempre significa: no puede absorberlo.







