Cualquiera que haya entrado en un growshop sabe de qué hablo: estanterías llenas de botellas de colores con nombres como Bud Explosion, Monster Bloom o PK 13/14. Los vendedores juran que sin esos productos tus cogollos serán como mucho “normales”, pero con ellos tendrás colas pegajosas, llenas de resina y cargadas de THC. ¿De verdad funciona o es solo un truco de marketing? Como cultivador que ha probado decenas de ciclos con y sin potenciadores, te digo algo claro: los potenciadores pueden funcionar, pero solo si sabes cómo y cuándo usarlos.
¿Qué son los potenciadores de floración?
En pocas palabras, son aditivos nutricionales diseñados para apoyar a la planta durante la fase de floración. Se centran sobre todo en:
- fósforo (P) – favorece el desarrollo de flores y raíces,
- potasio (K) – influye en el tamaño, densidad y sabor de los cogollos,
- microelementos y extras orgánicos que los fabricantes suelen mantener en secreto.
La diferencia respecto a un fertilizante de floración normal es que el potenciador es como un empujón de turbo: en lugar de un NPK equilibrado, le das una fórmula concentrada que lleva la producción de flores a un nivel más alto.
¿Cómo actúan en la práctica?
Cuando la planta entra en floración, cambia sus prioridades: en lugar de crecer en altura, concentra su energía en formar flores. Es aquí donde el equilibrio P/K es crucial. Un potenciador de floración aporta una dosis concentrada de estos nutrientes, lo que en la práctica se traduce en:
- cogollos más grandes y pesados,
- más resina (y por lo tanto más cannabinoides y terpenos),
- mejora del sabor y aroma tras el curado,
- a veces un período de floración un poco más corto (1–2 semanas menos).
Tipos de potenciadores de floración
1. Minerales (sintéticos)
El clásico: PK 13/14 o fórmulas similares. Actúan rápido, se dosifican fácilmente, pero cuidado: un exceso puede quemar las plantas.
2. Orgánicos
A base de melaza, extractos de algas, guano, ácidos húmicos o enzimas. Actúan de manera más suave, mejoran sabor y aroma, pero sus efectos en el peso de los cogollos suelen ser menos espectaculares que los minerales.
3. Bioestimulantes
Una categoría diferente: no se centran en aportar P y K, sino en estimular el metabolismo de la planta (con aminoácidos, vitaminas, hormonas vegetales). Su papel es aumentar la eficiencia general del cultivo, no solo el rendimiento.
¿Cuándo usar los potenciadores?
Aquí es donde mucha gente se equivoca. Si los das demasiado pronto, la planta sufrirá estrés por exceso de nutrientes. Si demasiado tarde, apenas tendrán efecto.
- PK 13/14 y similares – normalmente entre la 4.ª y 6.ª semana de floración (según la variedad).
- Potenciadores orgánicos – se pueden empezar antes, incluso desde la 2.ª semana de floración, ya que son más suaves.
- Bioestimulantes – a menudo se usan durante todo el ciclo, desde el crecimiento hasta la cosecha.
¿Cuánto cuestan?
Los precios dependen de la marca, pero aproximadamente:
- PK 13/14 – 8–12 EUR por litro (dura muchos ciclos, ya que las dosis son pequeñas),
- Potenciadores orgánicos premium (BioBizz, Advanced Nutrients, etc.) – 15–25 EUR por litro,
- Bioestimulantes – entre 30 y 50 EUR por litro.
Para un ciclo completo en 1 m² gastarás entre 5 y 20 EUR en potenciadores, dependiendo de si eliges productos económicos o de gama alta.
¿Son imprescindibles los potenciadores?
La respuesta es simple: no. Puedes obtener cosechas excelentes con un buen fertilizante de floración, un sustrato de calidad y una iluminación adecuada. Los potenciadores son como un turbo en un coche: no lo necesitas para llegar a destino, pero si quieres más potencia, ¿por qué no?
Y ojo: la mayoría de los problemas de los principiantes no vienen de la falta de potenciadores, sino de fallos básicos: mal pH, exceso de riego, tierra pobre o demasiado calor. Un potenciador por sí solo no arreglará un cultivo mal ajustado.
Mi experiencia
He probado muchos ciclos con y sin potenciadores. ¿La diferencia en el rendimiento? Realmente un 10–20 % más de materia seca y, a menudo, un aroma más fuerte después del curado. Pero ojo: solo cuando todo lo demás estaba controlado – luz, temperatura, humedad, pH, EC. Si alguien echa PK en una tierra mala con una bombilla de 150 W en un armario, no habrá milagros.
FAQ
¿Puedo combinar varios potenciadores?
Sí, pero con cabeza. Lo mejor es usar productos de la misma línea, ya que están diseñados para complementarse.
¿Pueden quemar mis plantas?
Sí, si te pasas con la dosis. Empieza siempre con la mitad de lo que recomienda el fabricante.
¿Qué es mejor: orgánico o mineral?
Para el sabor – orgánico. Para el peso y resultados rápidos – mineral.
¿Puedo hacer mi propio potenciador?
Sí. Muchos cultivadores preparan boosters caseros con melaza o ceniza de madera. Funciona, aunque es menos predecible que las mezclas comerciales.
Conclusión
Los potenciadores de floración no son una varita mágica, pero pueden darte ese plus que convierte una buena cosecha en una legendaria. Recuerda: son la guinda del pastel – la base siempre será un buen sustrato, un clima estable y una iluminación potente. Si tienes esos tres puntos bien afinados, un potenciador puede transformar tus cogollos en auténticas joyas.
